Duda constante sobre la bondad y la corrección de las propias acciones, ejecutadas con rigurosa meticulosidad para evitar culpas o infracciones.
Frecuente en sujetos que recibieron una rígida educación moral y religiosa, la escrupulosidad forma parte de las conductas rituales (v. rito, § 2) caracterizadas por un ceremonial (v.) obsesivo que favorece una serie más o menos compleja y estereotipada de actos con el fin de reducir la angustia determinada por pulsiones que el sujeto no puede satisfacer porque las juzga inaceptables (v. obsesión). A partir de estas premisas se justifica la interpretación de la escrupulosidad como un mecanismo de defensa respecto a un posible proceso disociativo subyacente.