Término psicoanálitico empleado para designar el investimiento o catexis libidinal sobre objetos externos. Opuesto al autoerotismo (v.) donde la tendencia erótica está dirigida al sujeto mismo, el aloerotismo se subdivide en homoerotismo, cuando la satisfacción se consigue con una persona del mismo sexo y heteroerotismo, cuando se relaciona con personas del otro sexo. S. Freud considera el aloerotismo como la fase final en el desarrollo de las relaciones objetales, caracterizada por una integración estable de las pulsiones y de su reducción en los canales de la genitalidad.
BIBLIOGRAFÍA: Freud, S. (1905)